Ya disponía del Cd de McIntosh y en esta ocasión he incorporado el previo C 500. Una joya sin la menor duda que me tiene tanto a mí – adicto confesable del jazz – como a mi esposa, casi diría que, estremecidos.
La mejoría ha resultado más que notable en relación al integrado que disfruto desde hace años y que de momento sigo utilizando a la espera de colocar a “la Marilyn“ (la etapa MC 275 de McIntosh como la llama Francisco) y rematar el conjunto .
Todo sueño llega y espero realizarlo en un tiempo razonable.
Agradecer desde aquí el siempre buen trabajo de Francisco, así como su atención y conocimiento que nos trasmite de un modo tan natural.
J.M.R.